PALABRA VEINTICINCO

 

Y, por ejemplo, como se demuestra al final de la Palabra Diecinueve, las palabras تَجْر۪ى en: وَالشَّمْسُ تَجْر۪ى لِمُسْتَقَرٍّ لَهَا[1]

se abre una ventana hacia un estilo elevado, como sigue: con las palabras  تَجْر۪ى, es decir, ‘el sol gira’, se pone en mente la enormidad del Creador al recordar la disposición ordenada del poder Divino en las alternaciones del invierno y el verano, y del día y la noche, y dirige nuestra mirada a las misivas del Eterno Adorado inscritas por la pluma de poder en las páginas de las estaciones. Proclama la sabiduría del Creador Glorioso.

Y con la palabra lámpara en: وَجَعَلَ الشَّمْسَ سِرَاجًا[2]

se abre una ventana hacia el estilo así: le hace a uno comprender la majestuosidad del Creador y la generosidad del Creador al recordar que el mundo es un palacio y que las cosas dentro de él son adornos, alimentos y necesidades preparadas para el ser humano y los seres vivos y que el sol es una vela servil, que demuestra que el sol es una evidencia de la unidad de Allah, y que el objeto más grande y más brillante de adoración de los idólatras es meramente una lámpara subyugada, un ser inanimado. Es decir, la palabraسِرَاجْ  nos trae a la mente la misericordia del Creador dentro de la grandeza de Su soberanía; nos recuerda Sus favores dentro de la amplitud de Su misericordia, y, al hacer eso nos informa de Su munificencia dentro de la majestuosidad de Su soberanía, de ese modo proclamando la unidad Divina, y diciendo en significado: “Una lámpara inanimada y servil de ninguna manera es adecuada para ser adorada”.

Y en lugar, de تَجْر۪ى corre hacia un lugar, nos recuerda las disposiciones maravillosamente ordenadas del poder Divino en las revoluciones de la noche y el día y del invierno y el verano, y al hacer esto, da a conocer la grandeza del poder de un solo Creador en Su soberanía. Es decir, gira la mente del ser humano desde los puntos del sol y la luna a las páginas de la noche y el día, del invierno y el verano y hace que preste atención a la sucesión de eventos escritos en esas páginas. Porque el Corán no habla del sol por el sol en sí, sino que, por Quien lo ilumina. Además, no habla de la naturaleza del sol, que el ser humano no necesita, sino del deber del sol, que es el motivo principal para el orden del arte del Soberano, el centro del orden de la creatividad del Soberano, un enlace para la armonía y el orden del arte del Soberano en las cosas que el Eterno Inscriptor teje con los hilos del día y la noche. Puedes comparar otras palabras del Corán con éstas. A la vez que todas son palabras simples y comunes, cada una realiza la tarea de una llave de los tesoros de significados sutiles.

Es porque el estilo del Corán es para la mayor parte elevado y brillante en las formas descritas anteriormente que en ocasiones un nómada árabe estaba cautivado por una sola frase, y sin ser musulmán, se prosternaba. Un nómada se prosternó al oír la frase:

فَاصْدَعْ بِمَا تُؤْمَرُ[3] Cuando le preguntaron: “¿Te has convertido en musulmán?”, respondió: “No. Me prosterno ante la elocuencia de esta frase”.

Cuarto Punto: Es la maravillosa elocuencia de sus palabras. Sí, tal como el Corán es extraordinariamente elocuente con respecto a su estilo y modo de exposición, así también hay una elocuencia verdaderamente fluida en sus palabras. La evidencia clara de la existencia de esta elocuencia es el hecho que no aburre ni causa cansancio; a la vez, el testimonio de los eruditos brillantes de las ciencias de la retórica forma una prueba decisiva de la sabiduría de la elocuencia.

Sí, no cansa ni si se repiten miles de veces; por cierto, da placer. No es una carga para la memoria de un niño pequeño y simple; los niños pueden memorizarlo fácilmente. No es desagradable al oído, afligido por la palabra más leve, de alguien que está extremadamente enfermo; es indulgente con él. Es como un helado de agua para el paladar de alguien que agoniza. La recitación del Corán le da un placer dulce al oído y a la mente de esa persona tal como el agua de Zamzam a su boca y paladar. La razón por la que no causa aburrimiento y la sabiduría de ello es esta: el Corán es alimento y sustento para el corazón, fuerza y riqueza para la mente, agua y luz para el espíritu, y la cura y el remedio para el alma. Todos los días comemos pan, y aún así no nos cansamos de él. Pero si tuviéramos que comer la fruta más selecta todos los días, nos aburriría. Eso significa que es porque el Corán es verdad y realidad, veracidad y guía, y es tan maravillosamente elocuente que no causa cansancio y preserva su frescura y complacencia como si preservara una juventud perpetua. Uno de los líderes de los Quraishíes incluso, un orador experto, fue enviado por los idólatras a escuchar al Corán. Él fue y escuchó, luego regresó y les dijo: “Estas palabras tienen tanta dulzura y frescura que no se parecen a las palabras humanas. Conozco a los poetas y adivinos; estas palabras no se parecen a las suyas. Lo mejor que podemos hacer es engañar a nuestros seguidores y decir que es magia”[4]. Así, incluso los enemigos más obstinados del Sabio Corán se sorprendían de su elocuencia.

Sería muy largo de explicar las causas de la elocuencia del Sabio Corán en sus aleyas, palabras y oraciones, entonces mantendremos acotada la explicación y mostraremos por medio del ejemplo la fluidez y elocuencia de las palabras en una oración obtenida a través de la posición de las letras y un solo destello del milagro que brilla en adelante desde esa posición. Tomemos esta aleya:

ثُمَّ اَنْزَـلَـ عَلَيْكُــمْ مِنْ بَعْدِ الْغَمِّ اَمَنَةً نُعَاسًا يَغْشٰى طَٓائِفَةً مِنْكُــمْ[5]

En esta aleya, todas las letras del alfabeto árabe están presentes. Pero, mira, a pesar de que todas las categorías de letras enfáticas están juntas, no hay dañado la suavidad del estilo. Por cierto, le ha agregado una melodía brillante y armoniosa, congruente y elocuente que surge de variadas cuerdas.

Además, nota con cuidado el siguiente destello de elocuencia: de las letras del alfabeto, Alif e , por ser las más altas y transportadas la una con la otra como hermanas, se repiten veintiuna veces. Y ya que م Mim y  ن Nun son hermanas y han cambiado de lugar[6], se han mencionado treinta y tres veces. Y ya que ش س ص Yin,  Sin y  Sad son hermanas en cuanto a la articulación, cualidad y sonido, cada una se ha mencionado tres veces. Y a pesar de que  ع غ‘Aín y  Gaín son hermanas, ya que ع  ‘Aín es más débil, es mencionada seis veces, mientras que  غ Gaín, por ser más fuerte, se menciona la mitad de las veces, o sea, tres. Y ya que ط ظ ذ ز Sai,  Dal,  Sa y  Ta son hermanas en cuanto a la articulación, cualidad y sonido, cada una se menciona dos veces, mientras que ل Lam y Alif en forma de لا LA se han unido y la parte de la لا Alif  está en forma de LA es la mitad que Lam, ل Lam se menciona cuarenta y dos veces y la mitad de eso, Alif se menciona veintiuna vez. Ya que ﻫ Hamza y Ha son hermanas en cuanto a la articulación, ﻫ Hamza[7] se menciona trece veces y siendo un nivel más débil, Ha se menciona catorce veces. Y ق ف ك Kaf, Fa y Qaf  son hermanas; ya que Qaf  tiene un punto adicional, se menciona ق  diez veces, ف  Fa, nueve veces, ك Kaf nueve veces, ب Ba nueve veces, y ت Ta doce veces. Ya que ت Ta viene tercera, se menciona doce veces. ر Ra es la hermana de Lam, pero según su valor numérico, ر Ra es doscientos y ل Lam treinta, entonces ya que se ha elevado a seis veces más, ha caído seis. Además, ya que ر Ra se repite en la pronunciación, se convierte en enfática y se menciona sólo seis veces. Y porque خ ح ث ض Dad, Za, Ha y Ja son enfáticas y obtienen cualidades adicionales en conexión con otras letras, se mencionaron sólo una vez. Ya que و Uáu es más débil que Ha y Hamza, y más fuerte que ى y Alif, se menciona diecisiete veces, cuatro veces más que la Hamza fuerte y cuatro veces menos que la Alif débil.

Así, la posición extraordinaria de las letras en el pasaje mencionado aquí y sus relaciones ocultas, y el orden hermoso y delicado, la regularidad sutil y la armonía muestran con tanta claridad como que dos más dos son cuatro que no estaría dentro de los límites del pensamiento humano el haberlo compuesto. En cuanto a la coincidencia, es imposible que hubieran interferido. Y entonces, tal como el orden y la regularidad extraños y maravillosos de la posición de estas letras llevan a la fluidez y elocuencia de las palabras, así también puede haber muchas otras instancias de sabiduría que están ocultas. Ya que semejante orden se ha seguido en las letras, seguramente en las palabras, oraciones y significados un gran orden misterioso, una gran armonía luminosa se ha observado que si el ojo lo viera declararía: ¡Ma’shallah! (¡Allah lo quiso así!), y si la razón lo comprendiera, exclamaría: ¡Barakallah! (¡Las bendiciones son de Allah!)

Quinto Punto: Es la excelencia de su modo de exposición; es decir, la superioridad, la concisión y la grandeza. Tal como hay elocuencia en el orden de las palabras, la fluidez en su redacción, la retórica en su significado, el glamour en su estilo, así también en su modo de exposición hay una superioridad y excelencia. Por cierto, todas las categorías y niveles del discurso, como el estímulo y la disuasión, la alabanza y la censura, la demostración y la guía, la explicación y el silencio de los argumentos, están en el nivel más alto de la exposición del Corán.

De los innumerables ejemplos de su modo de exposición[8], en la categoría de estímulo e impulso está la Sura del Hombre, que es tan dulce como el agua de Kauzar y fluye con la fluidez de la vertiente de Salsabil, es delicada como las frutas en el Paraíso, es tan bella como las vestiduras de las huríes: [9]هَلْ اَﯽﰢ ﱰ الْاِنْسَانِ          De los numerosos ejemplos de la categoría de disuasión y amenaza está el comienzo de la Sura del Envolvente:

هَلْ اَتٰيكَ حَد۪يثُ الْغَاشِيَةِ [10]. Aquí, la exposición del Corán tiene un efecto como plomo que hierve en los oídos de los desviados, y fuego que arde en sus cerebros, y Zaqum que escalda sus paladares, el Infierno que asalta sus rostros, como un árbol amargo y espinoso en sus estómagos. Un oficial como el Infierno encargado por alguien con la tarea de infligir tormento y tortura para demostrar sus amenazas, su separación con furia ardiente, y al decir:

تَكَادُ تَمَيَّزُ مِنَ الْغَيْظِ[11], por cierto demuestra qué increíblemente espantosas son las amenazas de ese Ser.

De los miles de ejemplos de la categoría de alabanza, el modo de exposición del Corán de las cinco Suras que comienzan con al-Hamdulillah (gracias a Allah) es tan brillante como el sol[12], adornado como las estrellas, majestuoso como los cielos y la tierra, amable como los ángeles, compasivo como la ternura hacia los niños de este mundo, y bello como el Paraíso del Más Allá.

De los miles de ejemplos de la categoría de la censura y de refrenarse, la aleya: اَيُحِبُّ اَحَدُكُمْ اَنْ يَاْكُــلَ لَحْمَ اَخ۪يهِ مَيْتًا [13], censura seis veces. Refrena de las habladurías con fuerza seis veces. Es así: como se sabe, la letra Hamza al comienzo de la aleya es interrogativa. Esto se filtra a través de todas las palabras de la aleya como agua.

Así, con la primera Hamza pregunta: ¿Acaso vosotros no tenéis razonamiento, el asiento de las preguntas y respuestas, que no comprendéis qué tan horrible es?

Con la segunda, pregunta con la palabra  يُحِبُّ gustaría: ¿Está vuestro corazón, el asiento de amor y de odio, tan corrompido que ama lo más despreciable?

Con la tercera, pregunta con las palabras اَحَدُكُمْ uno de vosotros: ¿Qué ha pasado con vuestra vida social y civilización, que recibís vuestra vitalidad de la comunidad, que encontráis aceptable un acto que así envenena vuestra vida?

Con la cuarta, pregunta con las palabras اَنْ يَاْكُــلَ لَحْمَ comer la carne: ¿Qué ha pasado con vuestra humanidad que desgarráis a tu amigo como una bestia salvaje?

Con la quinta, pregunta con las palabras  اَخ۪يهِsu hermano: ¿Vosotros no tenéis compasión ni sentimientos de hermandad que injustamente rasgáis con vuestros dientes el carácter del herido, vuestro hermano, en tantos aspectos? ¿Vosotros no tenéis razonamiento que mordéis tus propios miembros como un loco?

Y con la sexta, pregunta con la palabra مَيْتًا muerto. ¿Dónde está vuestra conciencia? ¿Está tan corrompida vuestra naturaleza que hacéis lo más repulsivo a la persona más respetable, tu hermano, como es comer de su carne? Es decir, las habladurías están censuradas y despreciadas por la razón, el corazón, la humanidad, la conciencia, la naturaleza humana y la solidaridad social y nacional. ¡Entonces, ved cómo esta aleya elocuentemente restringe este crimen en seis niveles concisos, en seis niveles milagrosos!

De los miles de ejemplos de la categoría de prueba y demostración, está la aleya:

فَانْظُرْ اِﱫﲄﲁ اٰثَارِ رَحْمَتِ اللّٰهِ كَــيْفَ يُحْيِى الْاَرْضَ بَعْدَ مَوْتِهَاۜ اِنَّ ذٰلِكَ لَمُحْيِى الْمَوْﯽﰢۚ وَهُوَ ﱬ كُــلِّ شَىْءٍ قَد۪يرٌ[14]

Su exposición es tal al probar la resurrección y al desterrar las dudas que no podría estar demostrado con más claridad. Es así: dice que, como se ha demostrado y explicado en la Novena Verdad de la Palabra Diez y en el Quinto Destello de la Palabra Veintidós, cada ejemplo de resurrección en primavera se dan de trescientas mil maneras en la tierra al volver a la vida con un orden y una diferenciación absolutos a pesar de las innumerables especies que están todas mezcladas en una confusión total, así demostrándole al observador humano que la resurrección de los muertos no sería difícil para Quien hace esto. Además, ya que escribir sin faltas ni errores con la pluma del poder cientos de miles de especies en la página de la tierra, todas juntas y una dentro de otra, es el sello del Único de Unidad; con esta aleya prueba la unidad Divina con tanta claridad como el sol, y demuestra la resurrección de los muertos con tanta facilidad y definición como la salida y la puesta del sol. Así, el Corán demuestra esta verdad en relación a la forma, como se describe con la palabra كَيْفَ Cómo, así como también la demuestra en detalle en muchas Suras.

Y, por ejemplo, la Sura de Qaf: قٓ وَالْقُرْاٰنِ الْمَج۪يدِ [15], prueba la resurrección de una manera tan brillante, delicada, dulce y exaltada que convence con tanta certeza como la llegada de la primavera. Mira: en respuesta a los incrédulos que niegan la vuelta a la vida de los huesos y al decir: “¡Esto es extraordinario; no puede ser!”, decreta:

اَفَلَمْ يَنْظُرُٓوا اِﱫﱷ السَّمَٓاءِ فَوْقَهُمْ كَــيْفَ بَنَيْنَاهَا وَزَيَّنَّاهَا وَمَالَهَا مِنْ فُرُوجٍ[16]

Su modo de exposición fluye como agua y brilla como las estrellas. Le da placer y deleite al corazón como los dátiles. Y es sustento.

Y en uno de los ejemplos más sutiles de la categoría de la demostración, dice:

يٰسٓ ﱳ وَالْقُرْاٰنِ الْحَك۪ــيمﭭ ﱳ اِنَّكَ لَمِنَ الْمُرْ سَلـينﭯ[17] Es decir: “Juro por el Sabio Corán que tú eres uno de los Mensajeros Divinos”. Este juramento indica que la prueba de la Misión Profética es tan certeza y verdadera, y su veracidad es tan meritoria de honor y respeto, que se jura por ella. Al indicar esto, está diciendo: “Tú eres el Mensajero, porque sostienes al Corán en tus manos, y el C orán es la verdad y es la palabra del Veraz, Allah. Porque contiene verdadera sabiduría, y carga el sello de milagro”.

Y uno de los ejemplos elocuentes y milagrosos de la categoría de prueba y demostración es esta:

قَاـلَـ مَنْ يُحْيِى الْعِظَامَ وَهِىَ رَم۪يمٌ ﱳ قُلْ يُحْي۪يهَا الَّذ۪ٓى اَنْشَأَهَٓا اَوَّـلَـ مَرَّةﮈٍ

وَهُوَ بِكُلِّ خَلْقٍ عَل۪يمٌﮋ  ﱳ[18]

Es decir, el ser humano pregunta: “¿Quién resucitará los huesos podridos?” Tú dices: “Quien los haya hecho en primer lugar y les dio vida, Él los resucitará”. Como fue demostrado en la tercera comparación de la Novena Verdad de la Palabra Diez, si alguien constituye a un ejército enorme en un día ante los ojos, y alguien más dice: “Al toque de un clarín, esa persona puede reunir a los miembros de un batallón que ha dispersado al resto; él es capaz de ordenar a ese batallón”, y tú dices, oh, ser humano: “No lo creo”, puedes ver qué negación ridícula sería.

De la misma manera, el Todopoderoso y Omnisapiente enrola e instala de nuevo y de la nada con la orden de “¡Se!” y es, y con un orden perfecto y el equilibrio de la sabiduría, a las partículas y a las facultades sutiles de los cuerpos de todos los animales como un batallón – que son como un ejército – y otros seres vivos, y crea cada siglo, e incluso cada primavera, todos los cientos de miles de especies de seres vivos como ejércitos sobre la faz de la tierra. ¿Puede cuestionarse entonces cómo Él puede reunir con un toque de la trompeta de Israfil las partes fundamentales y las partículas de un cuerpo como un batallón, que ya son familiares entre sí, al ponerlos bajo órdenes? ¿Se puede considerar improbable? Si se considera improbable, es una ridiculez desquiciada.

En la categoría de guía, el modo de exposición del Corán es tan emotivo y tierno, tan familiar y gentil que llena al espíritu de fervor, al corazón de deleite, a la mente de interés y a los ojos de lágrimas. De miles de ejemplos está esta aleya:

ثُمَّ قَسَتْ قُلُوبُكُــمْ مِنْ بَعْدِ ذٰلِكَ فَهِىَ كَــالْحِجَارَةِ اَوْ اَشَدُّ قَسْوَةً[19]

Como se prueba y se explica en la discusión de la tercera aleya en la Primera Estación de la Palabra Veinte, le dice a los Hijos de Israel: “¿Qué les ha pasado que a pesar de que la roca dura derrama lágrimas de doce vertientes como si fueran ojos ante un milagro como la Vara de Moisés (p.), permanecen indiferentes ante todos sus milagros, con sus ojos secos y sin lágrimas, y sus corazones duros y sin fervor?” Ya que este significado de la guía se explica allí, te referimos a esa Palabra y abreviamos esto aquí.

De miles de ejemplos de la categoría de hacer entender y silenciar con argumentos, considera sólo los dos ejemplos que siguen:

وَاِنْ كُــنْتُـﮥْ ﯺﰍ رَيْبٍ مِمَّا نَزَّلْنَا ﱬ عَبْدِنَا فَاْتُوا بِسُورَةٍ مِنْ مِثْلِه۪ وَادْعُوا

شُهَدَٓاءَكُــمْ مِنْ دُونِ اللّٰهِ اِنْ كُــنْتُمْ صَادِق۪ـينﭯ  ﱳ[20]

Es decir: “Si vosotros tenéis alguna duda, convocas a vuestros mayores y a quienes os apoyan para que os ayuden y den testimonio por vosotros, luego componed algo parecido a una simple Sura”. Ya que esto se ha explicado y probado en  Isharat al-I’jaz, aquí señalaremos un breve resumen de ello.

Es como sigue: El Corán de Milagrosa Exposición dice: “¡Oh, seres humanos y genios! Si tienen alguna duda de que el Corán es la Palabra de Allah y creen que es la palabra humana, entonces, vamos, aquí está, ¡veamos! ¡Traigan un libro como este Corán de alguien analfabeto, que no sepa leer ni escribir como el que ustedes llaman Muhammad el Confiable, y hagan que lo escriba! Si no pueden hacer esto, entonces no necesita ser ignorante, que sea una persona famosa de letras y culta. Y si no pueden hacer esto, está bien, que no lo haga por sí solo, toma todos los mejores trabajos de vuestros oradores y elocuentes, y por cierto de todos los genios de la literatura del pasado y todos los del futuro y la asistencia de todos tus dioses. Trabajen con toda vuestra fuerza, compongan algo como este Corán. ¡Y si no pueden hacer esto, dejen de lado las verdades del Corán y sus muchos aspectos milagrosos, que no es posible de imitar, y compongan un trabajo que se le iguale sólo en la elocuencia y en el orden de sus palabras!”

Con las palabras silenciadoras de:  فَاْتُوا بِعَشْرِ سُوَرٍ مِثْلِه۪ مُفْتَرَيَاتٍ[21]

dice: “¡Vamos! No quiero su verdadero significado de vosotros, que sean fabricaciones y mentiras y cuentos falsos. No podréis hacerlo. Entonces no necesita ser tanto como todo el Corán, sólo trae

بِعَشْرِ سُوَرٍ diez Suras parecidas. Tampoco podréis hacer esto, entonces traed una sola Sura. Esto será mucho también. Entonces, está bien, que sea equivalente a una Sura corta. Tampoco podréis hacer esto, a pesar de que tu necesidad de hacerlo es tan grande. Porque vuestro honor, vuestra dignidad y religión, y vuestro orgullo tribal, vuestra vida y propiedad, y vuestras vidas de este mundo y del Otro se salvarán al producir algo similar. De lo contrario en este mundo permaneceréis humillado, sin honor, dignidad, religión ni orgullo, y vuestras vidas y vuestra propiedad serán destruidas y perecerán, y en el Más Allá, como se indica en esta aleya:

فَاتَّقُوا النَّارَ الَّت۪ى وَقُودُهَا النَّاسُ وَالْحِجَارَةُ [22] seréis condenado a prisión perpetua en el Infierno; junto con vuestros ídolos, seréis combustible para sus fuegos. Ya que vuestra necesidad es así de grande, y ya que ahora habéis comprendido vuestra impotencia en ocho niveles, deberíais estar seguros más de ocho veces de que el Corán es un milagro. ¡Entonces creed en él o bien callad y ved al Infierno!”  Entonces ve la forma en que el Corán los obliga a aceptar el argumento de esta categoría de “argumento silenciador” que está dentro del “hacer comprender”, y di:        لَيْسَ بَعْدَ بَيَانِ الْقُرْاٰنِ بَياَنٌ “¡No hay modo de exposición mejor que el del Corán!” Por cierto, después del Corán no queda ninguna necesidad de más explicación.

Aquí hay un segundo ejemplo:

فَذَكِّرْ فَمَٓا اَنْتَ بِنِعْمَتِ رَبِّكَ بِكَــاهِنٍ وَلَا مَجْنُونٍﮈ ﱳ أَمْ يَقُولُونَ شَاعِرٌ نَتَرَبَّصُ بِه۪ رَيْبَ الْمَنُونِ ﱳ قُلْ تَرَبَّصُوا فَاِﯼﰍﰇ مَعَكُمْ مِنَ الْمُتَرَبِّص۪ـينﭯﮈ ﱳ أَمْ تَاْمُرُهُمْ اَحْلَامُهُمْ بِهٰذَا اَمْ هُمْ قَوْمٌ طَاغُونَﮊ ﱳ اَمْ يَقُولُونَ تَقَوَّلَهُﮊ بَلْ لَا يُؤْمِنُونَﮊ ﱳ فَلْيَاْتُوا بِحَد۪يثٍ مِثْلِه۪ اِنْ كَــانُوا صَادِق۪ـينﭯﮊ ﱳ اَمْ خُلِقُوا مِنْ غَيْرِ شَىْءٍ اَمْ هُمُ الْخَالِقُونَﮈ ﱳ اَمْ خَلَقُوا السَّمٰوَاتِ وَالْاَرْضَﮊ بَلْ لَايُوقِنُونَ ﱳ اَمْ عِنْدَهُمْ خَزَٓائِنُ رَبِّكَ اَمْ هُمُ الْمُصَيْطِرُونَﮈ ﱳ اَمْ لَهُمْ سُلَّمٌ يَسْتَمِعُونَ ف۪يهِﮊ فَلْيَأْتِ مُسْتَمِعُهُمْ بِسُلْطَانٍ مُب۪ـينﭰﮈ ﱳ اَمْ لَهُ الْبَنَاتُ وَلَكُمُ الْبَنُونَﮈ ﱳ اَمْ تَسْئَلُهُمْ اَجْرًا فَهُمْ مِنْ مَغْرَمٍ مُثْقَلُونَﮈ ﱳ اَمْ عِنْدَهُمُ عِنْدَهُمُ الْغَيْبُ فَهُمْ يَكْتُبُونَﮈ ﱳ اَمْ يُر۪يدُونَ كَيْدًاﮈ فَالَّذ۪ينَ كَــفَرُوا هُمُ الْمَك۪يدُونَﮈ ﱳ اَمْ لَهُـﮥْ اِلٰهٌ غَيْرُ اللّٰهِﮈ سُبْحَانَ اللّٰهِ عَمَّا يُشْرِكُونَ ﱳ[23]

Aquí explicaremos sólo una de las miles de verdades de estas aleyas como un ejemplo más de la categoría de silenciar con argumentos. Es: con las palabras اَمْ – اَمْ “O… O…”, silencia a cada grupo de personas desviadas con una pregunta retórica que expresa sorpresa y detiene a todas las fuentes de sus dudas. No deja ninguna grieta satánica por la que las dudas puedan entrar y esconderse; las cierra a todas. No deja ningún velo de desvío debajo del que puedan arrastrarse ni acechar; los arranca a todos. No deja ninguna de sus serpientes las aplasta a las cabezas de todas. En cada oración demuele la esencia de las ideas blasfemas de un grupo con una frase corta, o bien ya que la falsedad es obvia, la expone con silencio, o bien ya que se refuta en detalle en otras aleyas, aquí alude a ella brevemente. Por ejemplo, la primera oración alude a la aleya:

وَمَا عَلَّمْنَاهُ الشِّعْرَ وَمَا يَنْبَغ۪ى لَهُ[24] mientras que la oración quince señala a la aleya:

لَوْ كَــانَ ف۪يهِمَٓا اٰلِهَةٌ اِلَّا اللّٰهُ لَفَسَدَتَا [25] Puedes hacer más ejemplos de las otras oraciones como estas. Al comienzo dice: Anuncia los decretos Divinos. No eres un adivino, porque las palabras de los adivinos son confusas y conjeturales, mientras que las tuyas son verdaderas y certeras. Y no estás loco; tus enemigos incluso atestiguan tu sensatez perfecta.

اَمْ يَقُولُونَ شَاعِرٌ نَتَرَبَّصُ بِه۪ رَيْبَ الْمَنُونِ[26]

¿Te llaman poeta, como los infieles comunes e irrazonables? ¿Están esperando que perezcas? Diles: “¡Esperen! ¡Espero con ustedes!” Tus verdades vastas y brillantes están libres de las imaginaciones de la poesía y son independientes de sus ornamentos.

اَمْ تَاْمُرُهُمْ اَحْلَامُهُمْ بِهٰذَا[27] O como los filósofos irrazonables que confían en sus razones, se rehúsan a seguirte diciendo: “Nuestra mente es suficiente para nosotros.”. Pero la razón ordena que seas seguido, porque todo lo que dices es razonable. Pero una vez más, la razón por sí misma no se puede alcanzar.

اَمْ هُمْ قَوْمٌ طَاغُونَ[28] ¿O es la razón de su negación el que no se sometan a Allah Todopoderoso como tiranos perversos? Pero cómo terminaron los Faraones y los Nimrods, que eran los líderes de los opresores arrogantes, es bien sabido.

اَمْ يَقُولُونَ تَقَوَّلَهُ بَلْ لَا يُؤْمِنُونَ[29] O como embusteros mentirosos sin conciencia te acusan diciendo: “¡Has inventado el Corán!” Pero hasta este momento te han conocido como el más confiable entre ellos y te han llamado Muhammad el Confiable. Significa que no tienen intención de creer. De lo contrario deja que encuentren algo parecido al Corán entre los trabajos de los humanos.

اَمْ خُلِقُوا مِنْ غَيْرِ شَىْءٍ[30] ¿O como los filósofos absurdos que creían que el universo no tiene un propósito y es en vano, se creen que no tienen un objetivo y que no tienen sabiduría, propósitos, deberes o un Creador? ¿Se han vuelto ciegos que no ven que el universo está adornado de arriba  abajo con instancias de sabiduría y carga el fruto de los objetivos, y que los seres, desde las partículas hasta los soles, tienen tareas y están subyugados con órdenes Divinas?

اَمْ هُمُ الْخَالِقُونَ[31] ¿O creen como los materialistas faraónicos que “vinieron a la existencia por sí mismos, se alimentan por sí solos y crean todo lo que necesitan”, para así negarse a creer y a adorar? Eso significa que todos ellos creen ser el Creador. Mientras que el Creador de una cosa tiene que ser el Creador de todo. Es decir, su orgullo y altanería los han hecho tan absolutamente estúpidos que creen ser un Poseedor de Poder Absoluto, alguien que es absolutamente impotente y puede ser derrotado por una mosca o un microbio. Ya que han abdicado su razón y humanidad a este nivel y han caído más bajo que los animales e incluso que los seres inanimados, no se entristezcas con su negación. ¡Considéralos como una variedad de animales dañinos o materia sucia! ¡Ignóralos y no les des importancia!

[1] Corán, 36:38

[2] Corán, 71:16

[3] Corán, 15:94

[4] Suyuti, al-Itqan fi ‘Ulum al-Qur’an, ii, 117; Qadi Iyad, al-Shifa’, i, 264.

[5] Corán, 3:154

[6] Tanuín también es una Nun.

[7] Pronunciada y sin pronunciarla, Hamza es veinticinco, y tres más que Alif la hermana silenciosa de Hamza, porque sus puntos son tres.

[8] El estilo aquí ha metido en la ropa del significado de esta Sura.

[9] Corán, 76:1

[10] Corán, 76:1

[11] Corán, 67:8

[12] En estas frases se hace alusión a los asuntos discutidos en estas Suras.

[13] Corán, 49:12

[14] Corán, 30:50

[15] Corán, 50:1

[16] Corán, 50:6-11

[17] Corán, 36:1-3

[18] Corán, 36:78-79

[19] Corán, 2:74

[20] Corán, 2:23

[21] Corán, 11:13

[22] Corán, 2:24

[23] Corán, 52:29-43

[24] Corán, 36:69

[25] Corán, 21:22

[26] Corán, 52:30

[27] Corán, 52:32

[28] Corán, 52:32

[29] Corán, 52:33

[30] Corán, 52:35

[31] Corán, 52:35