RAYO CATORCE

NOTA

 

Como los justos e iluminados que leen el siguiente tratado[1], que se escribió hace diecinueve años, comprenderán claramente a Risale-i Nur, que todas sus ciento treinta partes, se ocupa sólo de la fe y del Más Allá y se escribió con ese espíritu, completamente libre de todo motivo político y mundanal. Este hecho claro y definido se corroboró con las largas investigaciones y estudios minuciosos que llevaron a cabo las Cortes de Eskishehir, Esparta, Denizli y Afyon. En relación a esto, solicitamos vuestra preocupación y asistencia para que nos regresen todos nuestros libros, que por más de veinte meses han sido confiscados por la Corte de Afyon, y ni el más mínimo punto se mostró en la Corte de Apelaciones como que constituye una ofensa, y que ha salvado la fe de miles de personas, y han sido elogiados y aplaudidos por sus lectores y académicos, y por el mundo Islámico.

La mayor parte de los libros retenidos por la Corte de Afyon se recogió por el primero de nuestros compañeros que fue liberado. Diciendo: “Le dimos nuestros libros al Maestro, su dueño; deberían dárselos a él”, los refirieron a mi. En particular, dejaron en la corte el adorado Corán que se escribió mostrando las milagrosas ‘coincidencias’ de letras, que estaba entre los libros confiscados. Antes que nada, esperamos la rápida devolución de aquellos libros y de nuestro Corán, que previamente nos fueron devueltos por las Cortes de Denizli y de Ankara.

Said Nursi

[1] La Carta Dieciséis se escribió varios años antes de las Cortes de Eskishehir y de Denizli, aún así, que rechace todos los puntos de objeción como si hubiera visto las tres cortes demuestra claramente que fue el objeto de otorgamiento y gracia Divina.