PALABRA TRECE

UNA ADVERTENCİA, LECCİÓN Y RECORDATORİO

DADO A UN GRUPO DE JÓVENES DESDİCHADOS

Cierto día vino un grupo de brillantes jóvenes buscando un elemento disuasorio efectivo para protegerse contra los peligros que surgen de la vida, la juventud y los deseos del alma. Como les dije a quienes previamente han buscado ayuda en Risale-i Nur, también les dije a estos jóvenes:

La juventud seguramente los dejará y si no permanecen dentro de los límites de lo lícito, se perderá y en lugar de sus placeres, les vendrán calamidades y sufrimientos en este mundo, en la tumba y en el Más Allá. Pero si, a través de la enseñanza Islámica, dedican la bendición de la juventud como agradecimiento honorable, en rectitud y obediencia, se mantendrá perpetuamente y será la causa que les permitirá obtener la juventud eterna.

En cuanto a la vida, si es sin fe, o por causa de rebeldía, la fe no será efectiva; producirá dolores, penas y llantos mucho más pesares que el placer superficial que trae. Porque, a diferencia de los animales, el ser humano posee una mente, piensa, y está conectado con el pasado, el presente y el futuro. De todos ellos puede obtener tanto placer como dolor. Mientras que los animales no piensan, los dolores que provienen del pasado y los temores y ansiedades por el futuro no arruinan su placer por el presente. Especialmente si los placeres son ilícitos, entonces son como una miel que está completamente envenenada.

Es decir, desde el punto de vista del placer de la vida, el ser humano cae a un nivel cien veces más bajos que los animales. En realidad, la vida para la gente desviada y negligente y de hecho, su existencia, más que su mundo, es el día en que se encuentran. Desde el punto de vista de su desviación, todo el tiempo y los universos del pasado son inexistentes, están muertos. Por lo que sus intelectos que los conectan con el pasado y el futuro, producen oscuridad y tinieblas. Debido a su falta de fe, tampoco existe el futuro. Además, debido a que piensan, las separaciones eternas que surgen de esta inexistencia, continuamente producen oscuridad para sus vidas, mientras que, la fe da vida a la vida, entonces a través de la luz de la fe, tanto el pasado y el futuro es iluminado y encuentra existencia. Como en el presente, se producen placeres elevados y espirituales, y luces de existencia para el espíritu y corazón con respecto a la fe. Encontramos una explicación de esta verdad en la “séptima esperanza” en el Tratado para los Ancianos. Los refiero a dicho libro.

Así es la vida. Si quieres el placer y el disfrute de la vida, dale vida a tu vida a través de la fe, y adórnala con deberes religiosos y presérvala absteniéndote de los pecados.

Con respecto a la realidad terrible de la muerte que está demostrada por las muertes de todos los días, en todos lados, todo el tiempo, les explico con una comparación, de la misma manera que les expliqué a los otros jóvenes.

Por ejemplo, una horca se ha erigido ahí en frente de tus ojos. Junto a ésta se encuentra una agencia de lotería, pero uno que da billetes para grandes premios verdaderos. Somos diez personas aquí, nos guste o no, deberemos juntarnos allí, no hay alternativa. Nos llamarán y como el tiempo es secreto, en cualquier minuto podrán decir: “¡Vengan y tomen su billete para su ejecución! ¡Suban al patíbulo!” o “¡Un billete para ganar un premio de oro por un valor de un millón de dólares ha llegado a cada persona!” ¡Ven y recíbelo! Mientras esperan que les digan esto, de repente aparecen dos personas en la puerta. Una de ellas es una hermosa y engañosa mujer con poca ropa. En su mano tiene un dulce aparentemente delicioso en extremo, que en realidad está envenenado y ella nos lo ha traído para comer. La otra persona es seria y no engaña.

Entra detrás de la mujer y dice: “les he traído un misterio, una lección. Si la estudian y no comen ese caramelo, se salvan de la horca. Con este misterio, reciben el billete para el premio incomparable. Escuchen y vean con sus propios ojos que aquellos que coman la miel van a la horca y hasta ese momento, sufren dolores mortales de estómago a causa del dulce envenenado. Y aquel que recibe el billete para el gran premio no es evidente, parece que también va a la horca. Pero hay millones de testigos que dan testimonio que pueden entrar fácilmente dentro del terreno del premio. ¡Entonces, miren por la ventana! Los oficiales de más alto rango y las personas más importantes relacionadas con este tema proclaman y avisan a grandes voces: ‘mientras ven con la clara certeza de tus propios ojos a aquellos subiendo al patíbulo, tan cierto como la luz del día, sin ninguna duda ni desazón aquellos que reciben los talismanes, el billete para el premio’”.

De esta manera, así como en la comparación, los placeres disolutos de la juventud en la esfera de lo ilícito, son como la miel envenenada, hacen perder la fe, que es el boleto al tesoro eterno y el pasaporte a la felicidad infinita. Una persona que se enreda con ellos desciende a la muerte, que es como la horca; y las tribulaciones de la tumba, que son como la puerta hacia la eterna oscuridad. Y ya que la hora señalada es desconocida, su ejecutor no diferencia entre joven o anciano, puede venir en cualquier momento y cortarles la cabeza. Si deciden dejar sus deseos ilícitos que son como la miel envenenada y tienen fe y realizan sus deberes religiosos que son como el misterio coránico, ciento veinticuatro mil profetas (la paz sea sobre ellos) junto con innumerables piadosos y gente veraz, unánimemente anunciarán que ustedes raciben el billete para el tesoro de la eterna felicidad, que surgen de la extraordinaria lotería del destino humano. Y han señalado su importancia.

En resumen: La juventud pasará… Y si fue desperdiciada, ocasionará miles de calamidades y dolores en este mundo y en el venidero. Si quieres comprender cómo es que la mayoría de los jóvenes caerán en hospitales con dolores que surgen de la juventud disipada y la prodigalidad, y en prisiones o albergues para indigentes a través de sus excesos, y en los bares debido a las aflicciones que surgen por su dolor y sufrimientos, entonces vayan y pregunten en los hospitales, en las prisiones y en los cementerios.

Con certeza, así como escucharán en muchos de los hospitales, los lamentos y gemidos de los enfermos a causa de la disipación y el libertinaje resultantes de los excesos vividos durante la juventud, se escucharán en las prisiones los lamentos arrepentidos de los desdichados jóvenes que fueron castigados por sus actos ilícitos que resultaron de los vicios de la juventud. Y entenderán que muchos de los tormentos de la tumba- ese reino intermedio cuya puertas continuamente se abren y se cierran para quienes entran- son el resultado de la juventud malgastada, como lo atestiguan aquellos que han descubierto la vida de la tumba y está afirmado por la gente veraz.

Además, pregunten a los enfermos y ancianos, quienes forman parte de la mayoría de la humanidad. Seguramente, la mayoría dirá con gran dolor y pensar:

“¡Ay! ¡Hemos desperdiciado nuestra juventud en pasiones y fantasías muy perjudiciales! ¡Tengan cuidado, no hagan lo que nosotros hicimos!”. Porque, como una consecuencia de los placeres ilícitos de cinco o diez años de la juventud, una persona sufre años de dolor y tristeza en este mundo, tormentos y daños en el reino Intermedio y las calamidades del Infierno en el Más Allá. Y aunque, dicha persona esté en una condición lamentable, no merece compasión.

اَلرَّاضِى بِالضَّرَرِلاَ يُنْظَرُلَهُ Porque quienes consienten libremente las malas acciones no son dignas de lástima. No la merecen.

Que Allah Todopoderoso nos salve y los salve de las tentaciones seductoras de este tiempo, y nos preserve de ellas. Amén.